City Lights ❀ TaeKook

City Lights

— ¿Aló? ¿Sí? ¡Oh mi amor! JungKook, estoy en la calle ahora mismo, estoy en camino a una presentación... sí, sí lo sé, llegaré temprano... te lo prometo, cariño... ¿Qué? ¿Qué departamento? No tengo idea de lo que hablas... que no, obviamente no compraría un departamento sin consultarte antes... cariño, por favor... ¿Lay? ¿Lay te llamo? ¿Cuándo te llamó?... está bien, me atrapaste... sorpresa arruinada, arruinaste mi sorpresa de aniversario, JungKook... sí, sí... está bien, te dejaré escoger las cortinas... también los muebles... ajá, también la cama... escogerás todo lo que se te antoje, cariño... te veré más tarde, amor, sí... yo también te amo... adiós...

El viento soplaba con violencia mientras él prácticamente corría entre las calles de New York, sus cabellos rojizos se agitaban con sus pasos apresurados, mientras que sostenía su celular con una mano y con la otra su portafolio de trabajo. Él tenía una presentación que realizar y estaba apurado, había dejado el coche porque pensó realmente que habría tráfico, y ahora se lamentaba de no haberlo traído consigo.

Además que al llegar a casa tendría que lidiar con un novio celoso, resopló ¿Por qué JungKook tenía que estar celoso? No le había dado motivos.

Jimin sonrío ladinamente, era una mentira enorme; claro que si le había dado motivo, un motivo con nombre y apellido: Min YoonGi. Su sonrisa se ensanchó de oreja a oreja al pensar en su amante albino. Ese muchachito de tez tan clara que lo traía loco los últimos doce meses, un año engañando al inocente de su prometido, con el chico más sexy que jamás había conocido.

Y no se arrepentía, su vida era perfecta.

O casi perfecta, ahora tenía que lidiar con un problema ¿Cómo mierda le decía a YoonGi que el departamento que habían escogido juntos hace menos de una semana, se lo tendría que dar a JungKook?

Odiaba lidiar con ambos, más incluso con su sexy azúcarado, era el mismo diablo cuando este se enojaba. No quería lidiar con un YoonGi enfadado por eso, cuando ni siquiera era su culpa, o eso pensaba. ¿Qué le podría llevar cuando lo visitara esa noche? Tenía que llevarle algo si quería decirle que ese bonito y amplio departamento ya no sería para él. Seguramente ya pensaría en algo. Pero antes, mataría a alguien.

—Déjame hacerte una pregunta Lay. ¿Eres un agente de bienes raíces o un idiota profesional?

Jimin mataría a su agente y su ahora ex amigo, lo haría picadillo y lo tiraría a los peces, si definitivamente eso iba a hacer.

— ¿Jimin? —El aludido respondió sorprendido por el celular ante el reclamo de su amigo al otro lado de la línea.

—Carajo Lay. ¿¡Cómo se te ocurre llamar a JungKook para decirle sobre el departamento!? —Vociferó el pelirrojo por su celular, demasiado frustrado por la ineptitud del otro.

—Tú dijiste que era para él. —Y definitivamente Lay no entendía su grave error.

—Que mierda, claro que no... —Sus mejillas comenzaron a encenderse debido a su enojo.

—Claro que sí. —Insistió Lay muy seguro. —Tú mismo dijiste que era tu nuevo nidito de amor, el que harías con el amor de tu vida. Ese es JungKook. —Dio por concluido el rubio no viendo el problema.

JiMin se frotó la sien con el dorso de su mano, sin soltar su portafolio.

—¡No es nidito de amor si JungKook escoge las cortinas, idiota! —Volvió a vociferar. —Además hablaba de YoonGi ¡Min YoonGi!

— ¿Min YoonGi? —Y entonces la mente de Lay recordó de inmediato que hace unas semanas había conocido al amante de su amigo, claro JiMin jamás le había dicho que aún seguía con JungKook. —Oh...

—Metiste la pata, imbécil. —Jimin estaba furioso, no furioso era poco, de verdad iba a asesinarlo.

—Bueno—. Suspiró Lay. —Compras otro departamento para tu amante y ya, todo resuelto. —Aconsejó de mala manera, empezando a molestarse, no soportaba que su amigo sea un patán, creía que ya había dejado eso cuando empezó una relación con el risueño de JungKook. —Además, es tu culpa por hacer idioteces JiMin, ¿Por qué estás engañando a JungKook? ¡Él te ama! —Le gritó sin importarle que estaba en su oficina y afuera tenía clientes que atender.

—No empieces con tus sermones, eres un imbécil Lay... —Chasqueó la lengua, odiaba que lo sermoneen. —¿Sabes qué? Cancela, cancela todo, ya no compraré otro departamento, ya no contigo... me buscaré otro agente, uno que si tenga sesos.

—¡Que te jodan JiMin!— Y colgó, no taparía su mentira. Si JungKook lo llamaba y le preguntaba algo, diría todo lo que sabe.

JiMin miró su celular, imaginando como podría meterse en el para salir directo justo al lado de Lay y ahorcarlo con sus propias manos. Ese maldito se había alborotado, y ahora sabía que si su prometido llamaría para preguntar algo, él lo soltaría todo. Conocía a Lay muy bien.

El estúpido y honesto Lay.

Miró su rólex, el último regalo que le había hecho JungKook por su cumpleaños. Empezó a sentirse mal, pero ahora no había tiempo para ello, tenía que correr ahora sí. Mierda, ¡Era realmente tarde!

JiMin guardó su celular, cruzando así la pista distraído, perdido en sus pensamientos aún, tan inmerso en ellos que no se percató cuando la luz del semáforo había cambiado hace ya rato, y mucho menos vio el bus público venir hacia él con demasiada rapidez, no lo vio venir, no sintió nada cuando este chocó con su cuerpo a una velocidad sorprendente. Tampoco escuchó los gritos de desesperación de los transeúntes.

No vio nada, absolutamente nada, solamente pudo notar su cuerpo tirado al medio de un tumulto de personas, su cuerpo inerte que poco a poco perdía grandes cantidades de sangre. Su respiración se cortó.

Gritó con miedo, ¿Cómo podía verse así mismo de esa manera? Se acercó a su cuerpo y maldijo por lo bajo. Definitivamente no era su día de suerte.

Había muerto, no había duda de ello.

༄

Actualmente esta historia lo había subido el 2016 (y fue mi primera historia en subir a esta plataforma), pero por varios problemas con wattpad que no vale la pena volver a nombrarlas, lo estoy subiendo de nuevo^^

He aprovechado esta ocasión para corregirla y mejorarla, espero que les guste. No he cambiado la esencia, pero vale la pena intentar mejorar ¿verdad? Además, recuerden que esta historia es una adaptación a la película "me ha caído el muerto", siempre lo mencioné y si pueden verla, háganlo, es una película muy divertida, esta historia la he adaptado a mi manera.

Actualizaré todos los días, y deseo puedan apoyarme, si ya la leyeron agradecería no hagan spolier, sin embargo no puedo dejar de agradecer su apoyo en todo. Les quiero mucho, muchas gracias por estar aquí aún.