XVI

91 12 2
                                    


Delante de mí solo veo un pasillo, tiene una extraña iluminación grisácea al fondo. Me muevo, parpadeo. Está todo oscuro. Siento su presencia. Avanzo lentamente hacia la luz. Reconozco el lugar.

"Estás en tu cama, durmiendo sin preocupaciones. Morgan se fue y te abandonó."

Me reiría pero no quiero despertarla. Celda 107, que tentador resulta pasar tan cerca. Si entro ahí, acabaría muerta en apenas minutos... delicioso.

No, no tienes suficiente poder para enfrentarla.

Me resigno y paso por delante de esta celda sin hacer nada al respecto. Sin embargo, la 106 parece mucho mejor para mi objetivo de hoy.

¿Verdad Cristina?

¡Oh que fácil es entrar! y que tranquilidad presenta ella ante su destino. Ataco. Ella abre los ojos. Pero cuando quiere cerrarlos de nuevo... ya ha muerto.

Tus manos son mías. Tu miedo al verme un regalo. Tu dolor mi festín. La sangre derramada un elixir y esas lágrimas son mi postre, mi dulce postre. Siento el poder nuevo, lo mimo, lo agasajo, lo disfruto. Pero no es el suficiente... ¿quién quiere ser mi próxima víctima?

Sonrío, me río, Mi risa retumba y se pierde en un eco.

Sembrar la desgracia es divertido.

Es hora de poner fin a aquello que comenzó hace años.

AzulWhere stories live. Discover now